El 16 de julio de 2024 el Ministerio de Justicia y Ministerio de Economía mediante la Resolución Conjunta 2/2025 (la “Resolución”) publicada en el Boletín Oficial reglamentaron el Decreto de Necesidad y Urgencia 1017/2024 (el “DNU” por sus sigla en español) para permitir su adecuada implementación.
El mencionado DNU creaba un régimen de implementación de hipotecas divisibles para los proyectos inmobiliarios para fomentar el crédito, impulsar al sector y a la construcción, y reducir el déficit habitacional en la Argentina.
Con la Resolución se regulan haciéndose efectivas las disposiciones respecto de:
– La constitución de hipotecas divisibles sobre inmuebles sujetos a proyectos inmobiliarios para la posterior división y afectación al régimen de propiedad horizontal o conjuntos inmobiliarios, o para subdivisiones originantes de parcelas del dominio común.
– El acceso a créditos hipotecarios a largo plazo para financiar la compra de un desarrollo inmobiliario en construcción o de un lote en un barrio, incluso antes de la subdivisión de terrenos.
– Hipotecas sobre el derecho real de superficie para proyectos inmobiliarios sobre la “rasante, vuelo o subsuelo” o el derecho a construir, dentro del plazo de duración de la superficie.
– La creación de un sistema para la anotación de boletos de compraventa y otros contratos sobre unidades a construir o proyectadas mediante acta notarial y su inscripción en el rubro gravámenes del folio real del inmueble afectado en los Registros de la Propiedad Inmueble de cada provincia y la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, o en entidades que sean autorizadas por la CNV.
La Resolución entró en vigor el día 16 de julio de 2025.